martes, 23 de julio de 2013

Manolo Estévez


Manolo Estévez celebró por todo lo alto sus treinta años de radio. Compartió con todos y cada uno de sus compañeros ese aniversario, desgranando cada anécdota, repitiendo una y otra vez cada detalle, con una sonrisa de niño feliz de ojos azules.  

En aquellos días, lo sorprendí en varias ocasiones ocupando mi ordenador. Aprovechaba cada vez que lo encontraba libre para mostrar a todo el que pasaba por el gabinete fotografías, anécdotas, sintonías antiguas. El tiempo se paraba en la sala de prensa porque perdían importancia las noticias del día. Y porque los más jóvenes, aunque no tan jóvenes como él, queríamos conocer cómo se hacía radio en los años ochenta, mientras nosotros nos prometíamos mantener esa ilusión que él nos transmitía, al menos, durante treinta años.

Cuando Manolo Estévez se puso por primera vez delante de un micrófono, yo hacía mis primeros garabatos en el colegio. Hoy, sigo aprendiendo a escribir cada día. Pero una lección que ya tengo asimilada es que las buenas noticias se celebran. Y por eso, yo también conmemoraré mis 30 años de profesión. Lo tengo apuntado en la agenda, será el 22 de marzo de 2029. Todavía me queda. Pero para entonces, también espero contarle a todo el que me quiera escuchar que me primera jornada laboral la viví con Soledad Duro, David Sánchez, Alejandro Medina, Fernando Rufo, Juande Corzo, y Agustín Álvarez. Después llegaron Elena Carmona y Fran Pereira. Y poco más tarde, para consolidar esa pequeña familia que habitaba en el Edificio Diplomático de El Puerto, tuvimos la suerte de recibir a Josefina Escudero, y a Adolfo Álvaro.

Cuando llegue ese día, me acordaré de Manolo Estévez. Que viva la buena gente, que viva la gente buena.